No es empresa fácil embarcarse para una vuelta al mundo. Cuando Avelino Bassols empezó a buscar patrocinadores entre los organismos catalanes, no encontró apoyo alguno. Sin embargo, su proyecto despertó el interés del gobierno andorrano y su barco se convirtió en una embajada flotante de este pequeño país sin mar, disfrutando de trato diplomático en la mayoría de los países donde hizo escala.
Su libro es una invitación al lector a participar en las vivencias de esta aventura, dramáticas algunas, divertidas otras, pero siempre interesantes.
Edición Española 1994
372 páginas
14,5 x 21,5 cm
Encuadernación: Rústica